Las personas que practican meditación durante muchos años
refuerzan las conexiones de su cerebro y presentan una mayor cantidad de
plegamientos en la corteza del mismo, según indica un estudio publicado en la
revista Frontiers
in Human Neuroscience. Estas características se relacionan con una
mayor memoria y con la habilidad para procesar información y tomar decisiones.
Además, el trabajo demuestra la plasticidad del cerebro, es decir,
su capacidad para adaptarse a los cambios ambientales.
En el estudio se incluyeron tanto a personas que llevaban más de 20 años practicando meditacióncomo a otras que no lo hacían. Los investigadores, de la Universidad de California (UCLA), compararon las imágenes de resonancia magnética de los cerebros de los voluntarios y midieron los plegamientos de la corteza. Además de encontrar diferencias entre los grupos, los científicos observaron que, cuanto más tiempo llevaban los participantes
"Los meditadores son considerados unos maestros en la introspección y la consciencia, así que los datos obtenidos son lógicos", indica Eileen Luders, uno de los autores, quién sin embargo afirma que también hay que tener en cuenta que aspectos genéticos y otros factores ambientales pueden contribuir a los resultados observados.